Cada vez más, las empresas empiezan a considerar la gestión de riesgos como una prioridad dentro de la organización; con este propósito surge la figura del risk manager.
El risk manager, también denominado gestor de riesgos o analista de riesgos, es el profesional que se encarga de la gestión del riesgo y la incertidumbre dentro de la empresa. Su tarea consiste en evaluar los distintos peligros a los que se puede enfrentar la compañía en su día a día, elaborar planes para evitarlos y mitigar sus efectos en caso de que estos riesgos se materialicen.
Aunque todavía no está muy extendida dentro de la empresa española, la figura del risk manager está ganando importancia en las organizaciones, dado el impacto que puede tener un riesgo no valorado en la cuenta de resultados y la supervivencia misma de la compañía. Ciberataques, robo de datos, cambios en los hábitos del consumidor, disponibilidad de habilidades clave, crecimiento económico incierto, incertidumbres geopolíticas, inestabilidad social o el cambio climático son algunos de los riesgos citados por los risk managers en la Encuesta europea de gestores de riesgos de 2020 de Ferma. A todos estos riesgos, y a otros de carácter interno, debe prestar atención el risk manager en su trabajo diario.
Las funciones del risk manager o analista de riesgos
La aparición del cargo de risk manager está vinculado al desarrollo del Enterprise Risk Management, disciplina que aborda la gestión del riesgo dentro de las organizaciones desde un punto de vista global, estratégico e integrado. En este sentido, el gestor de riesgos de una empresa se encargará de:
- Desarrollar, implementar y evaluar una cultura del riesgo en toda la organización.
- Alinear e integrar la gestión de riesgos como parte de la estrategia de negocio de la compañía.
- Elaborar el mapa de riesgos de la organización, identificando, analizando, evaluando, priorizando y reportando los diferentes riesgos, tanto internos como externos.
El analista de riesgos es, por tanto, un ejecutivo con capacidad para analizar y valorar las amenazas que se ciernen sobre la empresa; diseñar estrategias para contrarrestarlas y tomar decisiones en caso de que se presenten. El risk manager también será responsable de verificar el efecto que han tenido sus decisiones y de llevar un control sobre la ejecución de la política de gestión de riesgos de la empresa.
Habilidades y formación necesaria para ser risk manager
Para convertirse en un risk manager se requiere contar con una serie de competencias y habilidades profesionales, entre las que destacan:
- Formación financiera (titulación en Administración y Dirección de Empresas , Economía, Contabilidad, Finanzas, Auditoría, etc.).
- Conocimientos en matemáticas y estadística que le permitan entender, por ejemplo, qué son las variables aleatorias o qué significa una función de distribución de probabilidades.
- Manejo de sistemas complejos, aquellos que dependen de muchas variables.
- Capacidad de resolución de problemas y tomar decisiones, conociendo cómo se toman estas (saber cómo influyen los sesgos, el entorno, etc.).
- Dominio de softwares y tecnologías específicas para la gestión del riesgo, entre ellas las relacionadas con análisis y visualización de datos, automatización de procesos e inteligencia artificial.
- Habilidad de negociación con diferentes actores.
- Compresión de la norma ISO 31000, norma internacional que se aplica a los sistemas de gestión de riesgos.
Para poder obtener estas competencias y optar a una salida laboral como risk manager, existen cursos como el Máster en Gestión de Riesgos Financieros online de UNIR, que habilitará a quien lo supere para ser capaz de gestionar los diferentes riesgos tecnológicos y operacionales que afectan a la empresa y saber establecer herramientas para su medición, seguimiento y control.// UNIR
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