Universitarios y sindicatos paralizaron el centro paceño

La UPEA Bolivia

Cientos de estudiantes universitarios, de once casas de estudio superior del país, paralizaron ayer, por segundo día consecutivo, el centro paceño. Formaron mítines de protesta en los alrededores de la Universidad Mayor de San Andrés (UMSA) y entre cánticos y petardos demandaron al Ejecutivo respetar la autonomía universitaria. Mientras mineros, fabriles, maestros y trabajadores de salud realizaron marchas y bloqueos, en el segundo y último día de la huelga de 48 horas por un mayor aumento salarial, pero que tuvo poco seguimiento.

Los grupos de universitarios realizaron ruidosas protestas e hicieron detonar petardos que dañaron una imagen propagandística del Presidente, Evo Morales que estaba en el Ministerio de Salud. El Gobierno, a través del Ministro de Comunicación, Iván Canelas calificó estas acciones de "violentas" y "amedrentadoras".

El Ministro Canelas al criticar duramente la marcha de los universitarios sostuvo que "pequeños grupos" de estudiantes que se salieron de control amedrentaron a los ciudadanos de La Paz y perjudicaron el tránsito vehicular.

"Primero entre ellos se enfrentaron en la Universidad Mayor de San Andrés en la mañana de ayer destruyendo las puertas del monoblock, en el transcurso del día estos pequeños grupos generaron temor entre la población, hicieron reventar petardos y algunos cachorros de dinamita, obligando a los vehículos a que retrocedan", explicó Canelas.

Según el Ministro este tipo de actitudes no coinciden con el interés que ha mostrado el Gobierno y algunas autoridades de la Universidad para resolver los problemas a través de la concertación, por lo que lamentó la violencia generada en la jornada.

"Queremos expresar nuestra protesta, nuestra indignación, porque de esta manera no se resuelven los problemas, amedrentando a nuestra población, perjudicando a la ciudadanía no se van a encontrar soluciones a los problemas", acotó.

Para Canelas hay "un descontrol en la Universidad" porque se verificó el uso de cachorros de dinamita, que se denunció fueron lanzados al túnel que pasa por debajo del monoblock, creando zozobra en la población.

La COB también salió a las calles. Mineros, fabriles, maestros y trabajadores de salud realizaron ayer marchas y bloqueos en ciudades de Bolivia, en el segundo y último día de la huelga de 48 horas por un mayor aumento salarial, pero que tuvo poco seguimiento, informaron fuentes oficiales y sindicales.

Las movilizaciones se realizaron en La Paz, Cochabamba, Santa Cruz, las principales ciudades del país, aunque casi todas las actividades fueron normales, salvo en las escuelas del Estado que sí acataron la huelga de 48 horas que comenzó el lunes.

En La Paz marcharon y bloquearon calles mineros y trabajadores de de salud, en Santa Cruz la manifestación fue realizada por fabriles y maestros de escuelas públicas y en Cochabamba protestaron médicos.

Los manifestantes reclamaron en las calles un incremento del 30 % para todos los sindicatos, frente al 10 % decretado en febrero por el Presidente, Evo Morales, para este año solo para los maestros, trabajadores de la salud, policías y militares.

El Secretario Ejecutivo de la Central Obrera Boliviana (COB), Pedro Montes, declaró que la organización realizará hoy una evaluación del paro y decidirá "cómo continuar con la lucha" para que el Gobierno suba el porcentaje del aumento salarial.

Acusó a los Ministros de Trabajo, Félix Rojas, y de Obras Públicas, Wálter Delgadillo, que antes fueron dirigentes de la COB, de haber propiciado la ruptura del diálogo con el Ejecutivo y les tildó de "opositores y enemigos" de los trabajadores.

Rojas minimizó ayer el seguimiento de la huelga al asegurar que "el país sigue produciendo" y todas las actividades son normales, mientras que el lunes el mismo presidente Morales también anticipó el fracaso total de la protesta contra su política salarial.

"Ha llegado el momento en que se tienen que revisar tácticas y estrategias, porque este gobierno no es más que el sindicato hecho gobierno y poder político, y la COB tiene que adecuarse a ese momento histórico", dijo Rojas al pedir a los sindicalistas que reflexionen sobre su acciones.

El alto funcionario también volvió a descartar que Morales o el Vicepresidente del país, Álvaro García Linera, reciban a los dirigentes de la COB para dialogar de forma directa, como los sindicalistas solicitan de forma insistente.

El Decreto firmado en febrero por Morales también establece un 10 % como base para la negociación salarial en las empresas privadas y sube un 20 % el sueldo mínimo nacional, hasta 116 dólares.

La huelga de la COB tuvo escaso seguimiento desde el lunes cuando en La Paz quedó en segundo plano ante una protesta de miles de universitarios que reclaman a Morales respeto a la autonomía en la educación superior y que frene una reforma en seguridad social.

De enero de 2010 al mismo mes de este año los precios de los alimentos aumentaron 14 % en Bolivia.

La chispa de las protestas en los últimos meses es la inflación, que se disparó por el llamado "gasolinazo", un aumento de hasta 82 % de los precios de los combustibles que Morales decretó en diciembre y tuvo que retirar una semana después, ante las protestas sociales.

Jornada

_

Publicar un comentario

0 Comentarios