Elige muy bien a quien besas, porque puedes arriesgar tu salud y contraer una enfermedad llamada mononucleosis infecciosa, que se transmite por medio de la saliva y, aunque generalmente no es de consecuencias graves, te hará pasar un mal rato durante varias semanas.
Si sueles tener romances pasajeros y regalar besos como si fueran apretones de mano, lamento informarte que tu bienestar físico está en peligro. Sí, así como lo lees, pues esa placentera experiencia puede ocasionarte la también llamada “enfermedad del beso”, infección temporal ocasionada por el virus de Epstein Barr.
Seguro piensas que se trata de padecimiento inventado por algún bromista o alguien que quiere limitarte en tus aventuras románticas, pero no es así. La infección existe y al parecer 95% de la población la ha padecido y transmite el virus que la produce.
Se le conoce de esa forma porque el microorganismo se encuentra en la saliva y afecta principalmente a personas entre 15 y 30 años, ya que en esta edad es común tener diferentes parejas y probar el sabor de diferentes bocas.
Lo que guardas
Nuestra boca prácticamente es una jungla en la que habitan diversas especies de microbios, como protozoarios y, sobre todo, bacterias. Esto no debería sorprendernos tanto, pues ¿qué bicho podría resistir la tentación de vivir a la agradable temperatura de 36ºC, con humedad constante y fuente permanente de nutrientes?
Se calcula que entre 200 y 500 especies de bacterias forman la comunidad oral, siendo uno de sus habitantes más distinguidos el Trichomonas tenax, protozoario 50 veces más grande que las bacterias y al que, de hecho, se le puede considerar el gran tiburón de los mares de saliva. Otro residente es la Entamoeba gingivalis (causante de la famosa gingivitis), que viene siendo el león de la selva bucal, depredadora que siempre anda en busca de restos alimenticios o bacterias indefensas.
Al tener toda esta “fauna”, cuando das un beso transmites a la otra persona millones de bacterias y, por supuesto, él o ella te comparten cantidad similar. “Durante un beso las bacterias adquiridas se mezclan con las existentes. Pero no temas, ya que son inofensivas y desaparecen después de una hora.
El problema surge cuando alguno de los dos tiene el virus de Epstein Barr, el cual ataca al sistema linfático (defensas del organismo), bazo (órgano que fabrica elementos que defienden de infecciones al cuerpo) y, parcialmente, al hígado”, refiere el Dr. Rodolfo Acuña Soto, catedrático e investigador del Departamento de Microbiología y Parasitología de la Facultad de Medicina de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
No es gripe
Si ya te contagiaron, al principio no mostrarás alteraciones importantes y así puede transcurrir hasta un mes. No obstante, cuando la mononucleosis infecciosa se manifieste experimentarás síntomas parecidos a los de la gripe, como fiebre alta (hasta 40º centígrados), dolor de cabeza y muscular, así como malestar general.
Quizá pienses que eso no es nada y que finalmente si es algo parecido a la gripe no hay bronca; “pero después de una semana, los ganglios linfáticos del cuello, axilas e ingle se inflaman, lo que ocasiona dolor de garganta, pérdida del apetito, somnolencia, náuseas, vómitos, dificultad para respirar, dolor abdominal, crecimiento del hígado, erupción de ronchas en la piel y manchas oscuras en el paladar”, indica el entrevistado.
Si presentas algunos de estos síntomas de mononucleosis infecciosa, lo mejor es que vayas de inmediato al médico, quien te hará revisión física y solicitará análisis de sangre para confirmar la presencia del padecimiento. “Si es positivo y tienes la infección, habrá aumento en el número de glóbulos blancos (componentes de la sangre) y anticuerpos llamados heterófilos (elementos que contrarrestan los efectos dañinos de microorganismos)”, comenta el Dr. Acuña Soto.
¿Qué puedo hacer?
El médico te recomendará que guardes reposo en cama durante 2 ó 3 semanas, así que aunque sintieras algo de mejoría antes, olvida irte de reventón con tus cuates o andar de un lado a otro. Esto se debe a que cualquier esfuerzo físico podría ocasionarte ruptura del bazo, pues se encuentra inflamado y sensible (esta situación provoca hemorragia y requiere cirugía de inmediato).
También es necesario que bebas gran cantidad de líquidos y si el médico te recetó analgésicos o antipiréticos (contra la fiebre) para reducir las molestias, los tomes siguiendo al pie de la letra las indicaciones. Toma en cuenta que la inflamación de los ganglios linfáticos y engrosamiento del bazo pueden persistir durante más tiempo, incluso meses.
Las complicaciones importantes son pocas y sólo ocurren cuando el sistema inmunológico (que nos protege contra enfermedades) se encuentra muy debilitado y produce una respuesta insuficiente a la infección, lo que podría ocasionar inflamación del cerebro (encefalitis), parálisis de nervios del cráneo, convulsiones, obstrucción de nariz y garganta (vías respiratorias altas), neumonía (infección en pulmones), anemia, hepatitis (inflamación del hígado), sensibilidad a la luz, rigidez del cuello, frecuencia cardiaca rápida e ictericia (aspecto amarillo de la piel).
Finalmente, debemos decir que la mononucleosis también se contagia por otro tipo de acercamiento directo, como transfusión, contacto sexual, trasplante, compartir palillos o cualquier otro instrumento para comer y beber con tus cuates.// Portal odontólogos
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